29 abr 2014

Ser agradecidos beneficia la SALUD

Importante cantidad de investigaciones han sugerido que las personas más agradecidas sienten más bienestar. Son más felices, se sienten menos deprimidas, menos estresadas y más satisfechas con sus vidas y sus relaciones sociales.
Otros estudios psicológicos sobre personalidad también indican que las personas agradecidas también tienen mayores niveles de control de sus circunstancias, crecimiento personal, propósito en la vida, y auto-aceptación.
Las personas agradecidas tienen formas más positivas de lidiar con las dificultades que experimentan en la vida. Son más propensas a buscar ayuda de otras personas, reinterpretar y aprender de la experiencia, y dedican más tiempo a planificar cómo lidiar con los retos que tienen por delante.
También son menos negativas para encarar obstáculos de vida. Tienen menos tendencia a eludirlos o postergarlos, a negar que existan, a la auto-compasión o a culparse a sí mismos.
Adicionalmente, la gente agradecida duerme mejor. Y parece que esto se debe a que tienen menos pensamientos negativos justo antes de irse a dormir.
Algunos investigadores han dicho que la gratitud está mucho más relacionada con la salud mental que cualquier otro rasgo del carácter. Partiendo de la concepción de que la gratitud es la madre de todas las virtudes, otros estudios sugieren que las personas agradecidas son más propensas a tener niveles más altos de felicidad y menores niveles de estrés y depresión.
En un estudio sobre la gratitud, dirigido por Martin Seligman(pionero de la psicología positiva), se encontró que ciertos ejercicios de agradecimiento tenían alto impacto en el bienestar y la calidad de vida.
En esos ejercicios se destaca que el que tenía mayor efecto en el corto plazo provenía de una “tarjeta de gratitud”. En esta, los participantes del estudio escribieron y entregaron una carta de agradecimiento a alguien de su vida.
Este procedimiento demostró un aumento de 10% en las puntuaciones de felicidad, y una caída significativa en las puntuaciones de depresión. Y estos resultados se prolongaron hasta un mes después del ejercicio.
Así mismo, el ejercicio que tuvo más efectos en el largo plazo fue el de escribir “diarios de gratitud”. En este caso, a los participantes se les pidió que anotaran todos los días tres cosas por las que estuvieran agradecidos.
Las puntuaciones de felicidad de los participantes crecieron notablemente, y continuaron aumentando después del estudio. De hecho, se encontró que los mayores beneficios ocurrieron aproximadamente seis meses después de comenzar el diario.
Este ejercicio tuvo tanto éxito que muchos de los participantes continuaron utilizando sus diarios de gratitud, aún después de haber finalizado el estudio.
Si bien es cierto que hay muchas emociones y rasgos de la personalidad que son claves para el bienestar, hay evidencias de que la gratitud puede ser de una importancia excepcional.
Un estudio en Inglaterra mostró que las personas que estaban más agradecidas pudieron enfrentar mejor un cambio de vida. Antes de experimentar esas experiencias, se destacaban por estar menos estresadas, menos deprimidas y más satisfechas con sus relaciones.
Otras investigaciones también sugieren que la gratitud puede tener una relación única con la calidad de vida, y puede explicar los aspectos del bienestar que otros rasgos de personalidad no pueden.
Como puede verse, la experiencia de la gratitud está a nuestro alcance. Ejercitarla es una opción “muy económica” para generar oportunidades de bienestar y salud.
La gratitud es una poderosa manera de demostrar aprecio auténtico por la huella que dejan las personas en nuestra vida.

Fuente Oficial
http://www.ampliatusoportunidades.com/2013/08/19/el-agradecimiento-genera-bienestar-y-salud/

21 abr 2014

La Importancia de los Acidos Grasos Esenciales

Las grasas son una serie de compuestos que tienen en común ser insolubles en agua y solubles en determinados disolventes orgánicos. Los ácidos grasos forman parte de la composición de las grasas y ejercen diversas funciones fundamentales en el organismo: constituyen una importante fuente de energía, son un componente esencial de las membranas de todas las células e intervienen en el control y regulación de una gran variedad de procesos vitales como la coagulación sanguínea, la respuesta inflamatoria, la regulación de la temperatura del cuerpo, el funcionamiento normal del cerebro, o la salud de la piel, uñas y cabello, entre otras muchas funciones.
Existen también diversos tipos de ácidos grasos, que se agrupan en tres familias: omega-3, omega-6 y omega-9.
Ácidos grasos esenciales
Algunos de los ácidos grasos reciben el nombre de esenciales, porque el organismo no puede sintetizarlos, sino que es necesario que se obtengan a partir de la alimentación. Son el ácido alfa linolénico (de la familia omega-3) y el ácido linoleico (de la familia omega-6).
El ácido alfa linolénico se encuentra en el pescado, semillas de lino, vegetales de hoja verde, aceite de canola, o nueces.
El ácido linoléico se encuentra en los aceites de girasol, cártamo, sésamo, maíz borraja y onagra.
Beneficios y propiedades del omega-3
Las principales investigaciones sobre los efectos de los ácidos grasos se han centrado en el ácido graso omega-3, habiéndose demostrado claramente que reducen el riesgo de enfermedad cardiaca. La American Heart Association recomienda comer pescado al menos dos veces a la semana, especialmente pescado graso como caballa, trucha, arenque, sardinas, salmón y atún blanco.
El consumo de ácido graso omega-3 reduce la inflamación y puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como cáncer, artritis o enfermedades del corazón. Estos ácidos grasos se encuentran en altas cantidades en el cerebro y parecen jugar una función muy importante en el funcionamiento cognitivo. De hecho, los niños que no han recibido suficiente cantidad de ácidos grasos omega-3 durante su gestación tienen un mayor riesgo de presentar problemas visuales y del sistema nervioso.
La importancia del equilibro entre ácidos grasos
Para que los ácidos grasos puedan ejercer su función correctamente es muy importante no solo que existan en cantidades suficientes, sino también que haya un adecuado equilibrio entre las cantidades de omega-3 y omega-6. Los primeros ayudan a reducir la inflamación, mientras que los ácidos grasos omega-6 estimulan la reacción inflamatoria.
Una alimentación sana, como la dieta mediterránea, ayuda a mantener este equilibrio porque contiene alimentos ricos en omega-3, como cereales integrales, frutas y verduras frescas, aceite de oliva, pescado, o ajo. Sin embargo, en muchos países occidentales la alimentación tiene un contenido mucho más elevado de omega-6 que de omega-3. Este desequilibro se debe a diversas razones, como:
    Disminución del consumo de alimentos ricos en omega-3.
    Consumo de cereales refinados en vez de integrales.
    Aumento de la ingestión de azúcar (que interfiere con el metabolismo de los ácidos
   grasos).
    Aumento del consumo de grasas hidrogenadas.
    Deficiencias nutricionales (la vitamina B6, por ejemplo, es necesaria para el
    metabolismo de los ácidos grasos) y el aumento del consumo de fármacos.

Síntomas de deficiencia o desequilibro de ácidos grasos
    Piel seca y/o agrietada
    Ojos secos
    Caspa
    Irritabilidad
    Cabello seco
    Uñas blandas y quebradizas
    Sed excesiva
    Heridas que tardan en curar

Enfermedades asociadas con la falta o desequilibrio de ácidos grasos:

    Asma
    Diabetes
    Artritis
    Eczema
    Fatiga
    Hiperactividad
    Cáncer
    Depresión
    Caída del cabello
    Lupus
    Hipertensión
    Enfermedad cardiovascular
    Problemas de memoria
    Esquizofrenia
    Enfermedad de Alzheimer

PRINCIPALES PROPIEDADES DE LOS OMEGA-3
-Reducen el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, previenen la formación de trombos y coágulos sanguíneos y mejoran el tono vascular.
-Controlan el nivel en sangre del colesterol y los  triglicéridos.
-Ayudan a reducir la presión sanguínea, sobre todo si se padece hipertensión. Eso reduce el riesgo de eventos cardíacos adversos.
-Regulan el ritmo cardiaco evitando arritmias que pueden ser fatales.
-Son precursores de las prostaglandinas que intervienen en la agregación plaquetaria impidiendo las trombosis y la arteriosclerosis.
-Mantienen la flexibilidad de las membranas celulares.
-Favorecen el perfecto desarrollo del bebé antes y después del parto.
-Alivian del dolor y la rigidez en casos de artritis reumatoide o de gota.
-Tienden a disminuir la inflamación, un proceso que subyace en un amplio espectro de enfermedades como la artritis, el asma, la colitis, la psoriasis e, incluso, las enfermedades arteriales.
-Mejoran la dermatitis seborreica infantil.
-Protege a los fumadores de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica.
-Disminuyen la probabilidad de recaída en la Enfermedad de Crohn (inflamación crónica del tracto gastrointestinal).
-Favorecen la salud del sistema nervioso y fortalecen el sistema inmune.
-Estimulan la secreción de elementos químicos que influyen en la actividad eléctrica del corazón, tienen un efecto calmante en el cerebro, suben el ánimo y aumentan la concentración.
FUENTES NATURALES DE OMEGA-3
-La carne de los animales marinos.
-Los pescados grasos o azules: sardina, boquerón, caballa, palometa, chicharro, atún, salmón, anchoa, anguila, arenque, etc.
-El aceite de pescado y de mamíferos marinos como focas o morsas.
-Mariscos como los mejillones, las ostras o los berberechos.
-Frutos secos: especialmente las nueces, avellanas y pipas de calabaza.
-Las semillas y aceites de soja, calabaza, cáñamo, lino y germen de trigo.
-Las espinacas, el repollo, la lechuga y el brécol.
-La leche materna es una buena fuente de omega-3 aunque se ha demostrado que la cantidad de DHA –uno de sus ácidos constituyentes- decrece a partir del primer hijo.
 OJO CON LOS EXCESOS
Recuerde el lector, en todo caso, que si la carencia de estos ácidos es negativa no menos peligroso es el exceso. Por eso, cuando se recomienda una dosis de ácidos grasos poliinsaturados del 7,5% respecto de las calorías totales se está estableciendo un límite mínimo pero también existe un máximo porque si el porcentaje se eleva por encima del 12% puede producirse un descenso del HDL (colesterol bueno) al tiempo que puede aumentar el riesgo de formación de cálculos biliares. Otros estudios apuntan a problemas de tipo inmunitario, de coagulación de la sangre y glicemia en los diabéticos aunque estos efectos aún no están confirmados y únicamente se producirían en caso de consumo abusivo de omega-6. Lo que sí se ha demostrado es que un aporte elevado de ácidos omega-3 dificulta la absorción digestiva de la vitamina E. Por tanto, lo mejor es no pasarse con la dosis y, a ser posible, procurar que ésta proceda de la alimentación y sea prescrita por un especialista.


16 abr 2014

Monstruos Adentro de ti: PARASITOS


La pregunta no es si tenemos parásitos, la pregunta es que clase de parásitos tenemos?. Usualmente nos ocupamos de desparasitar a nuestros niños, mascotas y hasta plantas, pero se nos olvida que TODOS tenemos parásitos y existe una amplia variedad de gusanos que pueden estar usando su cuerpo como vivienda.
El 97 % de las enfermedades son producidas por los parásitos.
Síntomas como: Mareos, falta de concentración, síndromes pre-menstruales, dolor de cabeza o migrañas, insomnio, fatiga, hinchazón, tos, escalofríos, perdida o aumento de peso sin explicación, alergias, acné,  mal aliento, gripe constante, estreñimiento, diarrea.
Reconoce usted algunos de estos síntomas? Todos son provocados por los parásitos.
Las relaciones simbióticas entre parásito y anfitrión puede tener efectos beneficiosos, incluso cambiar la personalidad humana y la evolución. A menudo, sin embargo, los daños superan los beneficios. –
Existen parásitos como La lombriz intestinal (Ascaris lumbricoides)
Que puede llegar a medir de 15-35 centímetros de longitud en nuestro intestino.
No importa que tan saludable comas, si eres vegetariano, si solo tomas agua mineral o filtrada, si vives en la ciudad o en campo, si eres rico o pobre, TODOS sin excepción tenemos parásitos.






MEDIDAS GENERALES PARA PREVENIR LA PARASITOSIS
   Lavarse las manos con bastante agua antes de preparar los
alimentos o comer y después de ir al servicio sanitario o letrina.
   Lavar las frutas, los vegetales y verduras que se comen crudas.
   En aquellos lugares donde no hay agua potable, hervirla por
10 minutos o ponerle cloro(tres gotas de cloro por cada litro de agua)
   Tener un sistema adecuado de disposición de excrementos
(como primera medida tener letrina o interior de agua)
   Alimentarse adecuadamente y en
forma balanceada.
   Mantener la viviendo, los pisos, las
paredes y los alrededores limpios y secos.
   Evitar el contacto de las manos y
los pies con el lodo, como la tierra
la arena de aquellos sitios donde se 
sabe o se sospecha que existe
contaminación fecal.

Evitar ingerir alimentos en ventas callejeras y lugares con deficientes condiciones higiénicas

Pero lo más recomendable es crear un habito de desparasitación y desintoxicación 3 veces al año, así solo conservas los parásitos que tienen una relación positiva con tu organismo.

Si quieres conocer esos métodos envianos un email a bellezaorganicard@gmail.com


Ruth Ocumarez
Health Coach